Especialidades

Implantes dentales

¿Has perdido alguna pieza dental? Ya no es un problema, en Clínica Dental Dublín podemos reemplazarla de forma segura y predecible.

Estética dental

Una sonrisa bonita y atractiva ofrece una imagen de salud y juventud. Disponemos de tratamientos como el blanqueamiento y carillas dentales para que nada te impida sonreír con tranquilidad y naturalidad.

Ortodoncia

Los tratamientos de ortodoncia no están ligados solo a la infancia y la adolescencia, desde Clínica Dental Dublín pensamos que cualquier edad es ideal para lucir una sonrisa perfectamente alineada que proporcione salud y estética.

Endodoncia

En Clínica Dental Dublín nuestra prioridad es mantener tus dientes siempre que sea posible mediante la realización de tratamientos conservadores seguros e indoloros.

Periodoncia

En Clínica Dental Dublín contamos con profesionales altamente preparados para tratar enfermedades que afectan a tus encías y cuidar tu sonrisa. Acude a nuestro centro dental para recibir más información.

Bruxismo y ATM

¿Rechinas o aprietas los dientes? ¿Notas dolor en la mandibula por las mañanas? ¿Tienes dificultad o notas chasquidos al abrir la boca? ¡Ven a consultarnos! Tu articularción y tus dientes pueden estar sufriendo algún daño.

Odontopediatría

Nuestros profesionales harán que los más pequeños de la casa se sientan cómodos y entiendan las visitas al dentista como algo normal.

Odontología general

Nos encargaremos de prevenir y solucionar cualquier problema relacionado con tu salud bucodental.

Urgencias dentales

En Clínica Dental Dublín estamos cuando más nos necesitas. 

Cirugía oral y de muelas del juicio

Especialistas en cirugía oral y en extracción de muelas del juicio.

Implantes dentales

Las piezas dentales son un elemento fundamental de la cavidad oral con una importante función a nivel de la masticación, pero también son un elemento estético que forma parte de nuestra sonrisa y expresión facial.

En aquellos casos en los que se ha perdido algún diente o muela, es posible reponerlo colocando implantes integrados directamente sobre el hueso del paciente, sin afectar a los dientes vecinos y permitiéndonos ofrecer soluciones de gran confort y eficacia.

En nuestra clínica usamos implantes de titanio de última generación con para asegurar resultados de máxima garantía y calidad. Para cada caso se realiza un estudio individualizado para encontrar a solución adecuada incluso mediante la regeneración ósea necesaria para la colocación de los mismos.

¿En qué consiste el tratamiento de implantología?

Los implantes sustituyen las piezas dentales originales de nuestra boca. Se colocan dentro del maxilar o la mandíbula consiguiendo así fijar la dentadura perfectamente. Tras la oseointegración (fijación del implante al hueso), los implantes conviven de forma sana e inadvertida con el resto de los dientes y tejidos de la boca.

Por lo general, la colocación de un implante es sencilla y realizado bajo anestesia local. No es necesario pedir la baja en el trabajo y no implica complicaciones en la vida diaria del paciente, ya que las molestias que derivan de la intervención son bastante leves.

Una vez el implante está colocado, el paciente no deberá preocuparse en exceso por su mantenimiento. Sólo es necesario mantener la higiene y cuidados bucodentales habituales y acudiendo a una revisión con tu dentista periódicamente (al igual que antes de realizar el implante).

Estética dental

Lograr una sonrisa sana y armónica es muy importante. Para lograrlo, en Clínica Dental Dublín realizamos tratamientos estéticos con carillas, coronas y composites; además de blanqueamientos dentales para conseguir una sonrisa natural y atractiva que le permitirá sonreír con de nuevo con tranquilidad.

Para todo ello, y tras un estudio exhaustivo del caso, utilizaremos sistemas de última generación, proponiendo tratamientos controlados y predecibles.

La oferta en tratamientos blanqueantes es muy variada, pero para obtener los mejores resultados, de máxima durabilidad y seguridad para la salud dental y gingival, es necesario utilizar productos específicos en manos de profesionales cualificados.

¿Qué es el blanqueamiento dental?

El blanqueamiento dental es un tratamiento de odontología estética que tiene por objetivo eliminar las manchas dentales y hacer que la dentición adquiera una tonalidad más blanca y brillante. La actual popularidad de la estética ha convertido a este procedimiento odontológico en uno de los más solicitados de los últimos años.

Es de especial importancia que se siga un protocolo adecuado de diagnóstico, planificación del procedimiento y mantenimiento de los resultados. Por ello, es vital que el profesional conozca a fondo tanto las indicaciones como las contraindicaciones de las técnicas de blanqueamiento dental para poder transmitírselas a los pacientes.

Por otro lado, la población debe concebir este tratamiento como un procedimiento médico que ha de ser realizado bajo la supervisión de un odontólogo.

Causas del oscurecimiento de los dientes

Las manchas intrínsecas afectan a los dientes en su fase de formación, antes de que erupcionen en la cavidad oral, causadas por el consumo de determinados medicamentos como tetraciclinas, por hipoplasias de esmalte, deficiencia vitamínica o fluorosis. También se engloban en este grupo aquellas manchas que aparecen tras la erupción dental, producidas por golpes, fracturas o debido al paso del tiempo por envejecimiento de la dentición, que adquiere una tonalidad más oscura.

Las manchas extrínsecas o exógenas se producen por el contacto de los dientes con agentes pigmentadores, presentes en determinados alimentos, bebidas como el vino, el té y el café, y otros productos, como el tabaco. Estas manchas también pueden producirse tras el uso prolongado de determinados colutorios orales y pastas dentífricas a base de Clorhexidina.

Tipos de blanqueamiento dental

La clasificación del blanqueamiento dental depende del diente al que se le aplica el procedimiento.

Blanqueamiento dental realizado en la consulta odontológica. Se lleva a cabo en la clínica dental mediante la aplicación de un agente blanqueador a base de peróxido de hidrógeno al 35%, pudiendo ser este activado por una fuente de luz. Es necesario realizar previamente una profilaxis adecuada y revisar que la cavidad oral está sana. Tras este paso, se aísla la zona a tratar, de manera que se evite el contacto del agente blanqueador con la encía y la mucosa oral y posteriormente se añade el agente blanqueador. Es imprescindible seguir las indicaciones del fabricante del sistema blanqueador para que los resultados sean satisfactorios.

Se trata del método muy eficaz, ya que se maneja una alta concentración del componente blanqueante bajo el control de un dentista.

Blanqueamiento ambulatorio con la supervisión de un dentista. En este tipo de blanqueamiento la concentración de perióxido de carbamina es del 10%. Este método se realiza en el domicilio del paciente, bajo las indicaciones del dentista. Del mismo modo que en el blanqueamiento anterior, es necesario realizar antes del tratamiento una profilaxis y una revisión oral. Se elabora una férula a medida para el paciente en la que se aplicará el agente blanqueador.

Blanqueamiento en dientes endodonciados: por diversas causas los dientes endodonciados pueden oscurecerse con el tiempo. El blanqueamiento de dientes endodonciados debe realizarse en la consulta dental y consiste en la aplicación de un agente blanqueador en el interior del diente tras la eliminación de todos los agentes decolorantes y de cualquier resto de tejido necrótico existente.

Riesgos del blanqueamiento dental

El blanqueamiento dental es un tratamiento que, a pesar de obtener generalmente resultados satisfactorios, conlleva una serie de riesgos. Es obligación del dentista informar sobre ellos para que sean considerados previamente a la realización del blanqueamiento dental.

Entre los posibles riesgos del blanqueamiento dental se encuentran las reabsorciones dentales, la sensibilidad gingival y la sensibilidad dentaria postoperatoria.

Para reducir potencialmente los efectos adversos, es necesario cumplir con las medidas de seguridad biológicas necesarias, utilizando las concentraciones apropiadas según cada técnica y siguiendo los tiempos de exposición adecuados.

Ortodoncia

La ortodoncia busca el movimiento de los dientes para lograr una mejora de la oclusión, masticación y estética. En la Clínica Dental Dublín trabajamos con diferentes sistemas de brackets (metálicos, cerámicos, linguales…) y técnicas, como la ortodoncia invisible Invisalign®, en función de las necesidades de tratamiento y demandas del paciente.

Tras realizar un estudio individualizado del caso propondremos la solución más adecuada para realizar el tratamiento de forma segura, en el menor tiempo posible, con la máxima comodidad y los mejores resultados.

Los tratamientos de ortodoncia, no están pensados sólo para niños o adolescentes. Cualquier edad es adecuada para lucir una sonrisa perfectamente alineada.

¿A qué edad debo llevar al ortodoncista a mi hijo?

Una pregunta frecuente de las madres y padres es a qué edad deben consultar con un ortodoncista. Depende del problema a tratar la forma de actuar es diferente.

La ortodoncia interceptiva es un tipo de ortodoncia infantil que se emplea en niños a partir de los 6 años y que sirve para guiar el crecimiento y/o corregir el desarrollo óseo. Su objetivo fundamental es conseguir que los huesos tengan una posición y un tamaño adecuados. De esta manera, se mejorará la salud, funcionalidad, estética dental y apariencia facial. Dado que, durante la infancia, los huesos aún se encuentran en fase de crecimiento, se puede intervenir en ellos. El beneficio principal de esto, por tanto, es que evitamos complicaciones y anomalías en el futuro, cuando la persona ya es adulta y sus huesos maxilares se han desarrollado por completo.

Para el inicio de tratamiento de ortodoncia convencional con brackets en niños, por lo general, se suele esperar a que realice el recambio dentario completo.

Lo ideal es que el niño realice sus revisiones con el odontopediatra y sea este el que derive al especialista si lo estima necesario.

¿Hasta qué edad puedo ponerme ortodoncia?

La respuesta es sencilla: siempre que esté indicado. Los tratamientos de ortodoncia son aconsejables en todas aquellas personas que tengan problemas de maloclusión dental.

En la actualidad, encontramos personas de entre 20, 30, 40 e incluso 60 y 70 años que han decidido optar por un tratamiento de ortodoncia para mejorar no solamente la estética, sino también la funcionalidad de su sonrisa.

Normalmente, los tratamientos de ortodoncia en adultos son más complejos que los realizados a niños. Por un lado, los huesos maxilares están completamente desarrollados, por lo que no se puede actuar directamente sobre ellos para guiar la correcta erupción de los dientes y por ello en aquellas ocasiones en las que hay que corregir malposiciones en los huesos maxilares debemos recurrir a un tratamiento combinado de cirugía ortognática a nivel hospitalario y ortodoncia.

Por otro lado, es habitual es que las personas adultas se hayan realizado otros tratamientos previos a la ortodoncia para mantener la salud y la funcionalidad de sus piezas dentales: endodoncias, coronas o carillas dentales, implantes… Se debe analizar cada caso antes de iniciar un tratamiento de ortodoncia para valorar las limitaciones que nos podamos encontrar.

Para la realización de un tratamiento de ortodoncia es indispensable tener unos dientes y encías sanas. Por ello es fundamental realizar el tratamiento de caries u otros problemas dentales, así como controlar problemas de encías como la gingivitis o la periodontitis. Sólo entonces podrás iniciar tu tratamiento de ortodoncia.

Endodoncia

Cuando el nervio de un diente o muela se inflama o se necrosa (“muere”) por la existencia de grandes caries, traumatismos, desgastes… puede aparecer dolor o infección. En estos casos, es necesario realizar una endodoncia para conservarlo en boca el máximo tiempo posible.

Realizamos el tratamiento de forma indolora con los últimos avances en instrumental rotatorio, radiografía digital y localizadores de ápices, consiguiendo una alta tasa de éxito a medio y largo plazo.

¿Es cierto que la endodoncia estropea el diente y que se vuelven más frágiles?

Muchos pacientes rechazan el tratamiento de endodoncia con argumentos como “ no funciona”, “ los dientes endodonciados siempre se rompen”, “duele”. A pesar de la mala fama, la endodoncia es la heroína de la odontología, su misión es salvar y mantener dientes muy destruídos o con grandes problemas de infección o inflamación. La endodoncia es un tratamiento que lleva muchos años realizándose y con una tasa de éxito por encima del 90% si se realiza correctamente y no debemos olvidar que la alternativa a realizar este tratamiento conservador es casi siempre la extracción de la pieza dental.

En la Clínica Dental Dublín nuestra prioridad es conservar tus dientes siempre que sea posible, por eso apostamos por la realización de tratamientos de endodoncia combinados con otros tratamientos conservadores para alargar la vida a tus dientes lo máximo posible.

¿Es seguro realizar una endodoncia?

Sí, existe una amplia base científica que permite asegurar que la endodoncia si se realiza de forma correcta es un tratamiento totalmente seguro para el paciente.

¿Endodonciar un diente duele?

Los tratamientos de endodoncia tienen la reputación de ser dolorosos. Pero es precisamente el dolor el que suele hacernos correr a la consulta cuando ya es demasiado tarde para intentar otros tratamientos. Muchas veces es ese dolor el que nos advierte de que va a ser necesario que nos realicen una endodoncia por la inflamación o infección del nervio dental. La endodoncia se realiza para eliminar ese dolor.

La tecnología moderna y el uso de anestésicos locales hacen que este procedimiento sea rápido, seguro, por la general totalmente indoloro y una excelente manera de ayudar a salvar el diente natural.

Tener más sensible o algo de molestias durante unos días después de haberse realizado una endodoncia, es totalmente normal.

Periodoncia

Las enfermedades periodontales afectan a los tejidos de sostén del diente: hueso, encía y ligamento periodontal. Se trata de una de las enfermedades más extendidas en la población, y no siempre le damos la importancia que tiene. Además de poder resultar en la pérdida de los dientes, la periodontitis está relacionada con un riesgo aumentado de aparición y/o progresión de enfermedades cardiovasculares, diabetes, ciertas enfermedades respiratorias, artritis reumatoide, obesidad y síndrome metabólico, así como alteraciones del embarazo como el nacimiento de prematuros o recién nacidos de bajo peso.

Para lograr el éxito a largo plazo de cualquier tratamiento dental, es indispensable una salud periodontal óptima. Por ello, aplicamos planes de prevención, tratamiento y mantenimiento individualizados para cada paciente.

¿Qué es la periodoncia?

Es el área de la Odontología que se encarga del estudio, prevención y tratamiento de las enfermedades de los tejidos que protegen, rodean y sujetan los dientes: encía, hueso alveolar y ligamento periodontal.

Las lesiones periodontales se producen por acumulación de bacterias, que ocasionan la destrucción de encía y hueso y, si no son tratadas, estas dolencias avanzan progresivamente, pudiendo provocar movilidad y pérdida de los dientes.

¿Qué es la gingivitis?

Es la fase inicial de la enfermedad periodontal y se produce por la acumulación de placa bacteriana.

La placa está compuesta por bacterias y residuos que se adhieren a la superficie de los dientes y que, de no ser eliminada correctamente, se transforma en sarro, irritando e inflamando la encía.

Los síntomas más frecuentes son el enrojecimiento y el sangrado de las encías. La gingivitis es una afección reversible, pero si no es tratada adecuadamente, podría avanzar y convertirse en periodontitis.

¿Qué es la periodontitis?

Afecta a entre un 15% y un 20% de los adultos de entre 35 y 44 años, según la Organización Mundial de la Salud y es la primera causa de pérdida dental en adultos. A diferencia de la gingivitis, se caracteriza por la destrucción de tejidos de sostén del diente. Algunos de los síntomas son: inflamación y sangrado gingival, retracción de la encía, pérdida de papilas interdentales con aparición de espacios entre los dientes, movilidad dental…

Relación entre la enfermedad periodontal y enfermedades sistémicas

Múltiples estudios han revelado la asociación existente entre la enfermedad periodontal y alteraciones cardiovasculares: endocarditis bacteriana, infarto del miocardio, cardiopatía isquémica, trombosis, insuficiencia coronaria y venas varicosas. Se ha planteado que los microorganismos de la enfermedad periodontal provocan la inflamación del tejido cardíaco cuando pasan a la sangre del paciente y se alojan en válvulas anómalas del corazón y en tejidos cardíacos previamente dañados.

La relación entre la enfermedad periodontal y las afecciones respiratorias se establece cuando se ha producido un fallo en los mecanismos de defensa. Las enfermedades más frecuentemente relacionadas son: neumonía bacteriana, bronquitis, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y abscesos pulmonares. La aspiración de bacterias se produce cuando bacterias de las bolsas periodontales orales penetran y se extienden por el tracto respiratorio hasta llegar al pulmón.

La diabetes mellitus es otra de las enfermedades relacionadas con las dolencias periodontales, existiendo una relación directa entre ambas, ya que guardan factores genéticos, y alteraciones microbiológicas e inmunológicas en común. La principal evidencia es que la glucemia se descontrola cuando un el paciente presenta enfermedad periodontal y se estabiliza después del tratamiento.

También se asocian las enfermedades de las encías con afecciones renales, Alzheimer, trastornos cerebrovasculares y determinadas complicaciones del embarazo, como un parto prematuro y bajo peso al nacer.

Factores de riesgo de la enfermedad periodontal

Estilo de vida: malos hábitos dietéticos, vida sedentaria, consumo de bebidas alcohólicas…

Tabaco: principal factor de riesgo para la aparición y progresión de las periodontitis e interfiere con la cicatrización de los tejidos.

Predisposición genética: el genotipo tiene un papel importante en la susceptibilidad a la periodontitis.

Inadecuada higiene oral: el factor de riesgo más extendido. El apiñamiento dental y otros problemas de malposición dentaria pueden dificultar la realización de una completa limpieza oral diaria, provocando un alto riesgo de padecer patologías periodontales.

Embarazo y enfermedad periodontal: las variaciones hormonales que experimentan las mujeres durante la pubertad, menstruación, embarazo y menopausia, la terapia de reemplazo hormonal y el uso de anticonceptivos orales producen cambios significativos a nivel de las encías, especialmente si existe inflamación gingival provocada por placa bacteriana preexistente.

La gingivitis del embarazo es muy común y afecta a entre un 60-75% de las mujeres embarazadas. Además, la enfermedad periodontal se ha relacionado con el bajo peso del bebé y parto prematuro.

Cuando sea necesario, las mujeres embarazadas deben someterse al tratamiento de la enfermedad periodontal durante el 2º trimestre del embarazo para reducir el riesgo de complicaciones prenatales y postnatales.

Tratamiento de las enfermedades de las encías

El tratamiento de las enfermedades periodontales varía en función del estado de avance de la patología. El odontólogo se encargará de realizar una evaluación y pautar el plan de tratamiento más indicado.

Si la enfermedad se encuentra en un periodo inicial, es necesario eliminar las bacterias acumuladas mediante una limpieza dental, realizada por profesionales como el dentista o el higienista dental.

En el caso de la periodontitis, el tratamiento suele organizarse en una fase básica en la cual se eliminan las bacterias mediante el raspado y alisado radicular y, en aquellos casos más avanzados se considerará realizar tratamiento de cirugía periodontal y regenerativa.

¿Es importante el mantenimiento?

Las revisiones establecidas en el plan de tratamiento son fundamentales para el éxito a largo plazo. El mantenimiento de tu salud periodontal es tan importante como el tratamiento. Desde Clínica Dental Dublín le recomendamos realizar las revisiones periódicas indicadas por su odontólogo y acudir a la consulta ante cualquier enrojecimiento o sangrado anómalo o si alguien de su familia ha desarrollado una enfermedad de este tipo.

Bruxismo y trastornos de la ATM

La ATM es la articulación gracias a la cual abrimos y cerramos la boca. Casi un 50% de la población presenta alguna alteración funcional del sistema masticatorio. Esto puede originar molestias, como limitaciones al abrir y/o cerrar la boca, ruido o chasquidos en la zona de las articulaciones, dolor referido en el oído, cuello, espalda, mandíbula y dolores de cabeza.

El tratamiento pasa por restablecer el equilibrio entre músculos, dientes y las articulaciones mediante técnicas ortodóncicas, protésicas o bien mediante la utilización de placas de descarga (férulas) de diferentes tipos.

¿Qué es el bruxismo?

Es una disfunción de la articulación temporomandibular (ATM), que puede afectar a los músculos mandibulares, a la propia articulación (hueso y menisco articular) y a los dientes del paciente.

Algunos de los motivos por los que aparece esta patología son el estrés, la tensión, la maloclusión o la irritabilidad muscular.

Los síntomas más frecuentes en pacientes que padecen bruxismo son dolores de cabeza y de cuello constantes, molestias en los músculos faciales o el desgaste dental.

Para llevar a cabo un análisis adecuado del bruxismo y de la ATM se realizan diversas pruebas, como modelos articulados de la cavidad oral, radiografías y resonancias magnéticas para valorar la capturación disco-cóndilo. Es de vital importancia tratar el bruxismo al notar los primeros síntomas con el fin de mejorar la calidad de vida del paciente y evitar problemas mayores que compliquen el tratamiento.

El bruxismo puede ser diurno (es frecuente que algunos paciente refieran que apriertan los dientes mientras están trabajando, estudiando, conduciendo o concentrados en algo) o nocturno (apretamiento o rechinamiento involuntario de los dientes mientras dormimos).

¿Cómo tratar el bruxismo?

Fármacos antiinflamatorios: analgésicos y antiinflamatorios ayudan a disminuir la inflamación y las molestias propias de esta patología.

Férula de descarga: este dispositivo tiene como objetivo reposicionar la articulación a una posición de relajación muscular de manera progresiva. Asimismo, disminuye la tendencia al bruxismo y protege a los dientes del desgaste producido. Se trata de una placa de acrílico rígido

que se coloca en los dientes superiores o inferiores del paciente y que el odontólogo debe ajustar correctamente a la boca del paciente para que cumpla su función.

Visitar a un fisioterapeuta: Gracias a la ayuda de un fisioterapeuta se trabajan una serie de procedimientos dirigidos a proteger y recuperar la función de las estructuras móviles mediante el empleo de movimientos terapéuticos.

Medidas dietéticas y posturales: los ejercicios de corrección postural y unos hábitos alimenticios adecuados también son medidas que ayudan a tratar el bruxismo, así como evitar una vida sedentaria y practicar actividades físicas con frecuencia.

Odontopediatría

Los pequeños de la casa son más que bienvenidos en la clínica. Revisiones frecuentes los familiariza con su salud bucal y el personal de la clínica, reduciendo la tensión de la visita al dentista, y los educa para el futuro en la atención constante al cuidado de su salud.

Nuestros profesionales harán que se sientan cómodos y entiendan las visitas al dentista como algo normal, sin miedos.

La primera visita al dentista infantil

En la actualidad se recomienda que la primera visita al odontopediatra se realice cuando el niño cumpla un año. El motivo es que hay muchos problemas relacionados con la primera dentición que pueden darse a edades muy tempranas, desde la ausencia de dientes, caries, alteraciones dentales o de los maxilares, dientes supernumerarios (“extra”), así como patologías relacionadas con la erupción dental.

Además, la visita regular al dentista permite desarrollar de forma eficaz una correcta educación relativa a la higiene oral y hábitos dietéticos saludables, así como que el niño vaya ganando confianza con el personal de la clínica e ir al dentista sea algo que entienda como normal.

¿De qué se ocupa un dentista infantil?

En contra de lo que se pueda pensar son muchos los problemas que pueden surgir durante la infancia.

Caries: no es infrecuente la presencia de caries en dientes de niños muy pequeños. Incluso existe la comúnmente denominada de caries del biberón, en bebés y niños de edad preescolar. Además de tratarlas adecuadamente y evitar sus posibles complicaciones, es muy importante también la adopción de medidas preventivas para evitarla (identificación de factores de riesgo, sellado de fisuras, educación hábitos de higiene y dieta).

Traumatismos: es muy habitual que un niño sufra golpes o caídas que pueden suponer la fractura o pérdida completa de algún diente que requieren tratamiento. En estos casos es fundamental acudir cuanto antes al odontopediatra para valorar los daños y la necesidad de tratamiento.

Alteraciones en la posición de los dientes y maloclusiones: el odontopediatra explorará los dientes y los maxilares del niño para detectar posibles alteraciones de la mordida que impliquen la necesidad de un tratamiento ortodóncico, en cuyo caso lo derivará al ortodoncista. Esto es especialmente importante cuando, independientemente de la causa, se produce la pérdida prematura de algún diente de leche, ya que puede ser necesario el uso de mantenedores de espacio con el fin de que los otros dientes no ocupen el espacio impidiendo la correcta erupción del diente definitivo.

Tratamientos pulpares: a veces, los niños sufren caries profundas que afectan a la pulpa o nervio de los dientes, tanto de leche como definitivos. El odontopediatra determinará si la pieza debe mantenerse o no y qué tipo de procedimiento es necesario para su conservación.

Consejos de salud oral para niños:

Lávate los dientes 3 veces al día. Aunque aún no tengan la dentición definitiva, los niños también deben cepillarse los dientes después de cada comida, para evitar caries y otros problemas bucodentales.

A partir de la erupción del primer diente, los padres deben limpiarlos con gasa o dedales de silicona. A partir de los 2-3 años, los padres tienen que empezar a enseñarle a cepillarse solo, pero siempre bajo su supervisión.

¿La manera correcta de hacerlo? Primero los de arriba, de arriba abajo. Segundo los de abajo, de abajo a arriba. Tercero, la parte de los dientes con la que mastican, hacia delante hacia atrás. Por último, deben limpiarse adecuadamente la lengua con el cepillo.

Utiliza un cepillo infantil: los niños necesitan cepillos de dientes especiales, para evitar dañar sus dientes y encías. Los cepillos infantiles tienen las cerdas más suaves y redondeadas y el cabezal más pequeño, para que cuidar su boca sea más fácil y cómodo para ellos.

Sé más fuerte que las caries: sabemos que a los niños les encantan las chucherías y los refrescos, pero ¡cuidado con las caries! Acuérdate de que las bacterias responsables de la placa y el sarro se alimentan de los restos de comida que quedan entre sus dientes, en especial de los azúcares. Esto no quiere decir que debas prohibirle las chuches, pero el consumo debe ser puntual y ¡asegúrate de que después se lave bien los dientes!

Si se da un golpe y se le cae un diente…

No lo tapes con una servilleta o un pañuelo. Ponlo en dentro de un vaso leche y ven corriendo a la clínica. Lo mejor es que acudáis a la clínica antes de que pasen 2 horas. El resto déjalo en nuestras manos.

Odontología general restauradora y prótesis dental

Los procedimientos restauradores consisten en devolver al diente su forma, color y aspecto, cuando ha sufrido una agresión externa (como una caries o una fractura). Esta disciplina integra tratamientos estéticos, protésicos y reconstructivos encaminados a mantener la integridad dental el máximo tiempo posible.

Realizamos desde el más mínimo empaste, con odontología mínimamente invasiva, hasta tratamientos más complejos con coronas, puentes y prótesis removibles.

Desde la Clínica Dental Dublín recomendamos acudir a consulta en cuanto se detecte el mínimo indicio de un problema que pueda afectar a nuestra salud bucodental, y evitar así problemas mayores.

Mejor prevenir que curar.

- Cepilla tus dientes 3 veces al día, especialmente por la noche, antes de acostarte.

- Cambia el cepillo dental cada 3 meses, o cuando veas que está deformado o gastado.

- Utiliza seda dental o cepillos interproximales para limpiar entre los dientes.

- Usa enjuagues y pastas dentífricas con flúor para prevenir la caries.

- Realiza una revisión con tu dentista al menos 1 vez al año.

- Manten una dieta equilibrada y saludable.Reduce el consumo de azúcares (evitar dulces, refrescos, zumos envados, bebidas energéticas…) y aumenta el consumo de frutas y verdura.

- Deja de fumar, tus dientes y encías lo agradecerán.

Cirugía oral y extracción de muelas del juicio

Los cordales o muelas de juicio son los terceros molares que se ubican en la parte posterior de la boca. Suelen formarse durante la adolescencia y erupcionar entre los 17 y los 25 años. En general, tenemos 4 muelas del juicio: 2 superiores y 2 inferiores, pero no es infrecuente que haya personas que carezcan de alguna de ellas. Algunas personas tienen muelas de juicio que salen sin ningún problema y se alinean con los otros dientes, detrás de los segundos molares, en estos casos, no es necesaria ninguna intervención. Sin embargo, en muchas ocasiones, no tienen suficiente espacio para desarrollarse y erupcionar correctamente, quedando “retenidos”.

Las muelas de juicio con una posición incorrecta o parcialmente cubiertas por encía pueden provocar dolor, lesiones en dientes vecinos y otros problemas dentales. Debido a que son difíciles de limpiar, pueden ser más vulnerables a las caries dentales y a la enfermedad periodontal.

 

¿Cuándo hay que extraer las muelas del juicio?

Las muelas de juicio mal posicionadas o semierupcionadas que provocan dolor, inflamación u otras complicaciones suelen extraerse. Tu odontólogo también puede recomendar extraer las muelas de juicio aunque no causen síntomas para prevenir futuros problemas.

Siempre que esté indicado, lo ideal es extraer los cordales antes de los 25 años para reducir el riesgo de complicaciones durante y después de la extracción.

 

Síntomas relacionados con las muelas del juicio.

  • Encías enrojecidas o hinchadas.
  • Encías sensibles o sangrantes.
  • Dolor en la zona, dolor de oído, de garganta.
  • Hinchazón.
  • Mal aliento.
  • Mal sabor de boca.
  • Dificultad para abrir la boca.
  • Supuración de la encía.

 

Complicaciones relacionadas con los cordales.

Las muelas de juicio retenidas pueden causar varios problemas en la boca:

  • Daños en otros dientes. Si la muela de juicio hace presión contra el segundo molar puede provocar caries, daño en las raíces, pérdida del hueso que sustenta el 2ºmolar.
  • Quistes. Las muelas de juicio se forman en un saco dentro de la mandíbula. El saco puede llenarse de líquido, formando un quiste que puede dañar la mandíbula, los dientes o afectar a los nervios vecinos. En raras ocasiones, se desarrolla un tumor, generalmente no canceroso (benigno). Esta complicación puede requerir la extirpación del tejido y el hueso.
  • Caries. Las muelas del juicio son más difíciles de limpiar. Los alimentos y las bacterias quedan atrapados con facilidad entre la encía y la muela que salió en forma parcial.
  • Enfermedad periodontal o de encías. La dificultad para limpiar las muelas de juicio retenidas, que salieron de forma parcial, incrementa el riesgo de contraer una afección dolorosa e inflamatoria en las encías denominada «pericoronaritis» en esa zona



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